jueves, 30 de junio de 2011

Esta mañana

una mujer violenta en el violento día
Riendo.
Tras la línea de la memoria
a lo largo del largo del cuerpo de tu vida
donde se mueven infancia, juventud, la vida del tacto,
ojos, labios, pecho, vientre, sexo, piernas, contra las olas de las sábanas.
Miro a través de la pequeña planta
sobre el alféizar de la ciudad
hacia las altas torres como libros, entrechocándose voraces,
el río centellea, fluye corroído,
el intrincado puerto y el mar, las guerras, la luna, los planetas,
todo lo que puebla el espacio
en el sol visible invisible.
Violetas africanas en la luz
palpitando en un universo palpitante. Quiero una paz arraigada, y deleite,
las riquezas salvajes.
Quiero hacer mis poemas sensitivos:
encontrar mi mañana, encontrarte entero y
vivo moviéndote entre la gente anestesiada.

Te digo a través del aire:
hoy una vez más
intentaré no ser violenta
un día más
esta mañana, despertando sin cesar al mundo
en el día violento.
Muriel Rukeyser

No hay comentarios:

Publicar un comentario